Protusión dental

Protrusión dental: qué es y cómo tratarla

La protrusión dental se conoce comúnmente como «dientes de conejo«.

Hablando de forma más técnica, una protrusión dental se produce cuando los incisivos superiores encajan muy por delante de los incisivos inferiores debido a que estos tienen una inclinación excesiva.

Una persona que sufre una protrusión dental no puede cerrar bien los labios, básicamente por no poder cubrir bien los incisivos. Además, este problema provoca una mala oclusión, por lo que es necesario llevar a cabo un tratamiento de ortodoncia para corregirlo.

Además de problemas para masticar, una protrusión dental puede provocar traumatismos dentales, enfermedades periodontales, caries, alteración en el rostro y, además, problemas respiratorios.

¿Por qué se puede producir la protrusión dental?

Son muchas las razones por las cuales una persona puede sufrir de protrusión dental, desde factores genéticos hasta otros problemas como la retracción mandibular.

Independientemente de la causa, los problemas de la protrusión dental son notorios, ya que se puede producir una cierta incomodidad al comer debido a que la masticación no se hace de forma correcta. Veamos como se puede tratar la protrusión dental.

¿Cómo se puede corregir la protrusión dental?

Para corregir la protrusión dental el mejor tratamiento es la ortodoncia. Gracias a la ortodoncia se puede corregir esa inclinación hacia delante que tienen los incisivos a través del uso de brackets o de cualquier otro método como el invisalign en Torrejón de Ardoz.

Una vez que haya concluido el tratamiento de ortodoncia es necesario que el paciente utilice retenedores. Con estos retenedores se asegura de que las piezas dentales se mantendrán en la posición correcta una vez que haya finalizado el tratamiento y que no se volverán a mover.

Para lograrlo, se deberán de revisar cada poco tiempo por parte de nuestros dentistas en Torrejon de Ardoz  y cambiarlos para asegurarse de que estos siguen haciendo bien su labor y los dientes no se mueven.

Puentes dentales

Puentes dentales: qué son y para qué se usan

Uno de los tratamientos más habituales que se puede llevar a cabo en un dentista en Torrejón de Ardoz son los puentes dentales. Vamos a ver qué son y para qué se utilizan.

¿Qué son los puentes dentales?

Los puentes dentales son unas prótesis fijas que se usan para reponer una o varias piezas perdidas independientemente de que estas sean consecutivas o intercaladas.

Estos puentes dentales quedan completamente fijados a los dientes o implantes sin que se puedan quitar.

Principalmente existen dos tipos de puentes dentales, los puentes dentales tradicionales que se fijan en los dientes de la boca una vez que estos se han tratado y aquellos que se fijan sobre implantes dentales, fijándose a estos una vez colocados.

¿Para qué se utilizan los puentes dentales?

Un puente dental se utiliza para reemplazar las piezas dentales que se han perdido.

Existen muchas formas de poder reemplazar las piezas dentales perdidas, por ejemplo, los implantes. Sin embargo, los implantes no siempre son posibles, ya sea por cuestiones económicas o simplemente porque con el hueso que se tiene es imposible el implante, el puente dental es una buena alternativa.

Siempre que se vaya a llevar a cabo un puente se tiene que preparar la boca para ello. Esto quiere decir que tendremos que tallar los dientes naturales adyacentes, aunque estos no presenten ninguna patología. Esto es algo que puede llegar a incomodar a muchos pacientes, ya que se trata de estar alterando una pieza sana.

La alternativa del puente es bastante más económica y, por supuesto, menos invasiva que una cirugía con implantes. Estas son algunas de las razones por las cuales se acaba prefiriendo el puente, ya sea por cuestiones monetarias, comodidad o simplemente por imposibilidad a la hora de llevar a cabo el uso de implantes.