Pérdida de dientes
Existen dos razones por las cuales se produce la pérdida de dientes o edentulismo, el cual es la pérdida definitiva de una pieza dental:
- a causa de la caída de esta,
- o por su extracción por parte de un odontólogo.
Las personas más propensas a padecer esta condición son las de avanzada edad, ya que sus encías suelen presentar diversas patologías y su densidad ósea, fundamental para que la pieza dental pueda ser retenida en su lugar, es mucho menor. En los casos más graves, será un cirujano maxilofacial el que valore cada caso.
Causas de la pérdida de dientes
- Enfermedad periodontal: esta patología es degenerativa y destruye el tejido que se encarga de retener a la pieza dental en su lugar. Por lo tanto, con el tiempo los dientes se mueven por la presión de la masticación y se caen.
- Caries: cuando es detectada y curada a tiempo, una caries no representa un problema mayor. Sin embargo, si avanza mucho, será necesario practicar una endodoncia. El problema es que cuando toma la mayor parte del diente, este no podrá ser salvado y será preciso extraerlo.
- Golpes y traumatismos: un fuerte golpe o un serio traumatismo pueden quebrar uno o varios dientes y, si no son de leche, se perderán para siempre.
Soluciones a la pérdida de dientes
- Prótesis o puentes removibles: son la solución más económica para la ausencia de piezas dentales. Sin embargo, cuentan con claras desventajas. La principal de ellas es la mala adherencia que mantienen con las encías. Dado a que no se encuentran implantadas en el hueso, cuando el paciente mueve la boca para hablar o para comer, suelen salirse. Por otra parte, no logran las expectativas de estética que el cliente tiene al tener que recurrir a una prótesis dental.
- Implantes dentales: si bien son la solución más costosa, termina siendo la más beneficiosa. El implante se ajusta al hueso por medio de un perno y exhibe una corona de alto nivel estético.